Este medio pudo saber que el objetivo será llevar adelante un «piquete», impidiendo el acceso y egreso a la distribuidora local. Es que, argumentan, con sueldos que «cuadruplican el consumo del medidor, los consejeros dejaron sin servicio esencial a cientos de familias».

Lo que mencionaron es que personal de la Cooperativa Eléctrica cortó cables a los medidores comunitarios de los distintos asentamientos. Y no sólo eso, «también se llevaron los cables que los alimentaban, que son carísimo y que nosotros debimos comprarlo entre todos», destacaron.

Los vecinos argumentan que «es un doble daño», ya que «nos dejaron sin luz» y encima «se llevaron esos cables que son muy caros de reponer».