Sergio Federovisky, secretario de Control y Monitoreo Ambiental del Ministerio de Ambiente de la Nación, dijo que “algunas de las provincias involucradas no estuvieron de acuerdo” en avanzar en la creación de un área protegida en el Delta, en referencia a Entre Ríos.

Sin nombrar a la provincia, Federovisky la acusó de poner trabas a la intención de declarar un área protegida en el delta, “una idea original del Ministerio de Ambiente” que abarcaba a una zona “muy extensa” y que “podía involucrar distintos niveles de protección”, detalló.

Afirmó que se buscaba dar a toda el área “de casi un millón de hectáreas, algún nivel de protección permanente” y que esto se haría “con las actividades productivas incorporadas».

Sin embargo, aseveró que “lamentablemente, algunas de las provincias involucradas no estuvieron de acuerdo en ese momento en seguir avanzando”. Sostuvo que “Santa Fe y la provincia de Buenos Aires habían demostrado alguna disposición a favor, pero lamentablemente no se pudo avanzar más”. La otra provincia involucrada es Entre Ríos.

Federovisky comentó además que esa negativa derivó en “la creación de los faros de conservación, que fue una manera de brindar a estos espacios protección, aunque no para toda el área completa que debería ser claramente protegida”.

Finalmente, el funcionario nacional afirmó que al Delta del Paraná “hay que pensarlo como lo que es: un solo ecosistema que tiene que tener una sola política de manejo en la cual tiene que intervenir las tres provincias y el Estado Nacional”.