La Oficina de la Mujer del Poder Judicial informó que en 2023 Entre Ríos, hubo cinco femicidios directos. Este lunes se conmemora el día Ni Una Menos y habrá marchas en todo el país.

La Oficina de la Mujer del Superior Tribunal de Justicia de Entre Ríos dio a conocer, en el contexto de la conmemoración del día «Ni Una Menos», datos del Registro Nacional de Femicidios correspondientes a 2023. Las alarmantes estadísticas exhiben que en Entre Ríos, en aquel período hubo cinco femicidios.

La información que brindó el Servicio de Información y Comunicación (SIC) del Poder Judicial, aportó que a nivel nacional, según el informe suministrado por la Corte Suprema de Justicia de la Nación, hubo 250 víctimas directas de femicidio y 22 víctimas de femicidio vinculado, lo que implica 272 víctimas letales de violencia de género en Argentina durante 2023. Las 250 víctimas directas de femicidio incluyen 245 víctimas mujeres cis y 5 víctimas mujeres trans/travestis.

La información dio cuenta que en Entre Ríos, durante 2023 se registraron cinco causas judiciales como femicidios directos, detallando las franjas etarias de aquellas: de las víctimas, dos integran el grupo etario de 35 a 44 años; uno al de 18 a 24 años; otro al de 25 a 34 y otro al de 45 a 59 años. También se agregó que las víctimas directas de femicidio en nuestra provincia tenían, en promedio, 37,4 años al momento del hecho.

También se precisó que al menos dos víctimas directas presentaban condiciones de interseccionalidad: una era migrante interprovincial y otra se encontraba en situación de prostitución al momento del hecho; y que al menos uan de las víctimas directas, estuvo desaparecida o extraviada antes de haber sido hallado su cuerpo.

Respecto de los cinco vínculos entre las víctimas directas de femicidio y los sujetos activos, en un caso eran cónyuges y convivían; en otro eran ex cónyuges sin convivencia, en uno eran ex pareja sin convivencia y en otro tenían otro tipo de relación sexo-afectiva y tampoco convivían. También se precisó que en un caso la víctima y el sujeto activo tenían otro tipo de vínculo: eran compañeros de trabajo y, de elementos obrantes en la causa judicial, surge que el sujeto activo estaba obsesionado con la víctima.

En los casos de femicidio directo, se destacó que la totalidad de las víctimas conocían a los sujetos activos.